Los 10 mejores discos de Tori Amos

Los 10 mejores discos de Tori Amos

Descubre a la compositora y pianista estadounidense que inspiró a Amy Lee, Sharon den Adel, Vibeke Stene y Liv Kristine

¿Quién es Tori Amos? Yo no lo sabía hasta hace varios años, más de 10, cuando decidí a buscar música de una de las artistas preferidas de Amy Lee, la cantante de Evanescence. Myra Ellen Amos nació el 22 de agosto de 1963 en Carolina del Norte, USA, hace casi 59 años y  a los cinco años fue becada en el Conservatorio de Peabody de Baltimore, donde estudio piano clásico desde 1968 hasta 1974, cuando le cancelaron la beca porque le interesaba el rock y la música popular, lo que se pudo reflejar años más tarde en sus covers de canciones de Led Zeppelin, Nirvana y otros artistas. 

A partir de los trece años, su padre, un pastor metodista, la llevaba a los bares para que tocara el piano ante el público. A los 21 años se mudó a Los Ángeles para probar suerte en la industria musical. Allí compuso y grabó su primer disco con la banda glam pop, "Y Kant Tori read", que fue un fracaso comercial. El grupo se disolvió, pero como ella tenía contrato con Atlantic Records para grabar cinco discos más, decidió volverse solista. Junto a su pareja de aquella época, el productor Eric Rosse, Tori compuso su primer disco, el hoy famoso "Little Earthquakes" que salió a la venta en 1992. A diferencia de lo anterior, Tori comenzó a componer canciones del estilo alternativo en la que predominaba el piano. Su debut oficial como solista fue en el año 1992 con "Little Earthquakes", que fue un éxito internacional y la llevó a la fama mundial. En la actualidad, ella grabó 16 discos de estudio pero yo voy a elegir los 10 mejores. 

1. Little Earthquakes (1992) 

El comienzo de todo. No me equivoco al decir que este es el disco más personal de Amos, sobre todo por las letras, en los que habla de la religión, las relaciones familiares, la sexualidad y la feminidad, de los abusos sexuales, la violación que sufrió a los 21 años en Los Ángeles y lo narra acapella en la desgarradora honestidad de "Me and a Gun". 

Este álbum contiene hits como "Silent All These Years", una denuncia explícita al silenciamiento de las mujeres, "Crucify" en el que aborda la religión, la conmovedora balada "Winter", dedicada a su padre... Pero también hay lugar para la reflexión sobre las  relaciones personales, como "China", en la que se aborda la distancia en una pareja, o "Tear on Your Hand", en la que se cita a Neil Gaiman y el cómic The Sandman, años más tarde se hizo íntima amiga del escritor... y cierra con la monumental "Little Earthquakes". 

La manera de cantar de Tori Amos, su virtuosismo como pianista, su descarnada expresividad y emotividad fueron percibidas y valoradas por varias vocalistas famosas... Yo la descubrí gracias a Amy Lee, y no es casualidad que algunas de mis cantantes favoritas (Sharon den Adel, Liv Kristine) sean fans de esta artista. Lo que Tori Amos logró en los noventa, lo consiguieron pocas compositoras mujeres. Cuatro o cinco discos casi perfectos. Ni Bjork o PJ Harvey, con lo mucho que me gustan y las admiro, tienen la genialidad ni la creatividad de la señora Amos. Un disco intimista, en el que destacan el piano y los demás instrumentos como simples acompañantes, que llega y te conmueve hasta la médula. El que le recomiendo a alguien que no haya escuchado nada de ella. 

2. Under the Pink  (1994) 

El segundo disco de Tori, que continúa en una línea similar a la del debut, canciones en las que el piano sigue siendo el protagonista, pero me parece un disco un poco más rockero y atrevido que el anterior. Más visceral y por eso me llevó años agarrarle el punto. Acá se encuentra el single  "Cornflake Girl" su tema más conocido, la preciosa "Past the Mission" en la que sigue haciendo catarsis sobre sus experiencias trágicas (con su amigo y admirador Trent Reznor de Nine Inch Nails haciendo los coros) , la desoladora "Baker Baker" en la que predominan los instrumentos orquestales.. ¿Qué mas puedo decir de un disco que es una obra maestra? Tori Amos saca afuera todo lo que hay bajo la piel de la mujer, nos cuenta el fin su amistad con una amiga ("Bells For Her"), el odio y la competencia entre mujeres ("The Waitress"), hasta habla de la masturbación y la culpa en "Icicle", hasta de la princesa rusa Anastasia Romanova en la bellísima "Yes Anastasia", en la que aborda el valor ante la adversidad... 

Under the Pink es un álbum hermoso, elaborado a nivel musical, en el que el piano, los violines, los cellos, hasta las guitarras eléctricas y la batería se combinan de manera perfecta. Impecable la producción de Eric Rosse, la última en la que participaría debido a su ruptura sentimental con la artista. Este disco tuvo más éxito en Inglaterra que en Estados Unidos, por lo que Amos se terminó mudando a Londres para promocionar más su carrera musical. Aun si, fue un éxito rotundo y vendió dos discos de platino. Los noventa fueron la década dorada para la pianista estadounidense, en ésa época fue cuando más éxito tuvo  y su creatividad estaba en el máximo nivel. Después de los 2000, la calidad de los discos no sería la misma. 

3. To Venus and Back (1999)

Disco doble que continúa en la senda electrónica y experimental de "From the Choirgirl Hotel"  , me voy a centrar en el disco 1, porque el disco 2 es un directo con canciones de sus álbumes anteriores. Este es uno de mis preferidos de la cantante, porque aquí dejó aflorar la creatividad al máximo y las letras abarcan temas muy variados: la inquietante "Juarez" habla de los femicidios en la ciudad fronteriza mexicana, "Glory of the 80's", de la nostalgia de épocas pasadas, "Josephine", de la esposa de Napoleón Bonaparte, "Datura", de la colección de plantas del jardín de Tori y cierra con la conmovedora "1000 Oceans", que refleja la pérdida y la muerte de nuestros seres queridos (se refiere al dolor de su esposo, Mark Hawley, cuando falleció su padre). Además, hace una defensa de la homosexualidad al contar la salida del closet de uno de sus músicos, en "Riot Poof".

"To Venus and Back" es perfecto, experimental, con sutiles elementos electrónicos que le aportan un plus a las canciones, para mi es mucho más logrado que su antecesor. No hay una atmósfera deprimente y triste, al contrario, es un álbum repleto de vida, misterioso, en el que Tori nos va relatando diferentes historias con su estilo tan personal y distintivo. Habla de la sexualidad y el erotismo en tracks como "Lust", "Suede"... Recomiendo el disco 2, sobre todo las versiones en vivo de  "Little Earthquakes" y los B- sides.

4. Scarlet's Walk  (2002)

A "La caminata de Scarlet" le tengo un cariño muy especial. Fue uno de los primeros discos de Amos que escuché y me parece el mejor que grabó en toda la década del 2000. Es un disco conceptual, inspirado en parte por los atentados del 11 de septiembre, en el que ella regresa a sus orígenes. No hay nada de electrónica en él, el sonido se basa en el piano, las guitarras y un ambiente de música country, que no llega a ser country, pero es su disco más americano, por así decirlo. Tranquilo, sin grandes sobresaltos, peca de ser un poco extenso pero me parece una excelente introducción para el que no la haya oído nunca antes. 

También influyeron en las letras las historias que le contaba la abuela cherokee de la pianista. Al respecto, dijo el escritor Neil Gaiman, amigo de Tori, dijo:

El CD trata de América, es una historia que también es un viaje, empieza en Los Ángeles y atraviesa el país, dirigiéndose poco a poco hacia el este. América está ahí, y sitios y cosas específicas, la historia de los nativos americanos y la pornografía y una chica en un avión que nunca llegará a Nueva York, y Oliver Stone y Andrew Jackson y la locura y muchas cosas más. Sin mencionar a una chica llamada Scarlet quien puede ser el país o puede ser una persona o un rastro de sangre.

Neil Gaiman

Las canciones que recomiendo de este extenso pero hermoso álbum: "Amber Waves", "A Sorta Fairytale", "Strange", "I Can't see New York", "Another Girl's Paradise" y la orquestal "Gold Dust", que Tori reversionaría en "Gold Dust". Si bien no todas las canciones tienen el mismo nivel, al ser un disco conceptual es un detalle que no es relevante. 

5. Boys for Pele (1996) 

El disco de la polémica, que sigue dividiendo aguas entre los fans, hasta el día de hoy.. El más alabado por la crítica y el más repudiado por la disquera de la artista. Tori no estaba pasando un buen momento cuando compuso las canciones para Boys For Pele, su relación con el productor y músico Eric Rosse, llegaba a su fin tras siete años de estar juntos. Un viaje a Hawai fue la inspiración para el título del disco, Pele es una diosa volcánica de la mitología hawaiana. En este trabajo, Amos logró reconstruirse a sí misma tras la extensa y agotadora gira de "Under the Pink". 

Barroco, experimental, grabado en una iglesia en Irlanda, donde la artista conocería a su futuro esposo, el productor británico Mark Hawley, Boys For Pele es una maravilla de álbum. Original, variado, grabado con instrumentos antiguos como el clavicordio (que se luce en "Professional Widow" y "Beauty Queen/Horses") , cuerdas de la Orquesta Sinfónica de Londres, coros, etc.

Hay tres canciones que hablan de la ruptura de Tori con Eric: "Blood Roses", "Caught a lite sneeze" y "Putting the Damage On", puro sentimiento y emoción. Pero las más hilarantes y barrocas son "Mr. Zebra", "Hey Jupiter" y "Father Lucifer". De la segunda parte, destacaría "In the springtime of his voodoo", inspirada por los viajes por Sudamérica de la pianista. La desconsoladora balada "Marianne" está dedicada a una amiga suya que se suicidó. Un disco extenso, complejo y excéntrico, que requiere varias escuchas, pero aun así es una de las cimas creativas de la señora Amos. Imprescindible.

6. Strange Little Girls (2001)

El disco de covers de Tori Amos, en los que eligió once canciones de intérpretes masculinos y las llevó a su terreno personal. Excepto el cover de Eminem, pienso que todas quedaron geniales y algunas, irreconocibles, como "Raining Blood" de Slayer, o "Happiness is a Warm Gun" de The Beatles, que es la más destacable. Otras que me encantan son "Time" de Tom Waits, "Enjoy the Silence" de Depeche Mode (una de mis bandas favoritas) en la que le aporta un aura más sombría y melodramática, la homónima "Strange Little Girl", entre otras. Las canciones están tan bien elegidas que si uno no supiera quienes son los compositores, pasaría por un disco escrito por la propia Amos. No soy fan de los álbumes tributo u homenaje, pero este vale la pena de verdad y es uno de los últimos discos de su era dorada, la de los noventa y principios de los 2000. 

7. Gold Dust (2012)

Disco de versiones orquestales de clásicos de su repertorio, como "Winter", "Silent All These Years" y "Precious Things". La mejor de todas es la versión abreviada de "Yes, Anastasia" y otras joyas como "Cloud on my Tongue", o "Jackie's Strenght", aunque también aparecen B- Sides y tracks de discos de los 2000, como "Girl Dissapearing" del American Doll Posse. Le recomiendo "Gold Dust" a los que ya conocen parte de la discografía de esta artista, no a los que recién se inician en ella. Para disfrutarlo de verdad, es conveniente conocer primero las versiones originales. Aunque si eres simpatizante de las melodías sinfónicas y orquestales, te animo a que le des una chance.

8). From the Choirgirl Hotel (1998) 

Me genera sentimientos encontrados, no es un disco fácil de escuchar. El primero en el que ella experimentó con la música electrónica y en el que escribió sobre el dolor de sufrir un aborto, cuando estaba embarazada de su primer hijo con Mark Hawley. Las letras desgarradoras de "Spark", "Cruel" y "Playboy Mommy" tratan sobre esta pérdida, por lo tanto este es un disco oscuro, lúgubre, visceral y muy catártico para la artista. Sin embargo, hay algunas canciones alegres y electrónicas como "Raspberry Swirl" y las acústicas "Black Dove", (en la que se refiere a las pesadillas), la conmovedora  "Northern Lad" y el clásico "Jackie's Strength", que hace alusión al momento en el que su esposo le pidió matrimonio, sin duda una de los tracks más hermosos que Amos compuso en toda su carrera. Es un álbum que hasta el día de hoy me resulta difícil escuchar completo, por toda la carga sentimental y emocional que posee. Aun así, es un gran disco. 

9. American Doll Posse (2007)  

El disco más rockero de la pianista en años. Si bien tiene tracks de gran calidad  y con cierta chispa creativa que se echaban de menos en sus últimos trabajos, me parece un tanto irregular porque es demasiado extenso y hay unas cuantas canciones de relleno. Con diez alcanzaba, de las que hubiera incluido las mejores de American Doll Posse, otro disco conceptual con letras súper interesantes, como sus oposición a la guerra de Irak y críticas a la misoginia en la industria musical. ¿Lo mejor? Las rockeras "Big Wheel", "Teenage Hustling" y "You Can Bring Your Dog", donde destacan las guitarras eléctricas que mantuvieron un rol secundario en sus primeros discos de los 2000. Salvaría dos o tres baladas más, como "Digital Ghost" y "Girl Dissapearing", pero no mucho más. 

10. Ocean to Ocean (2021)

Me costó mucho elegir uno de los últimos discos de esta artista, pero de los tres que grabó luego de su etapa sinfónica (Gold Dust y Night of Hunters), este es el que más me convenció. Un disco que Amos compuso durante el confinamiento por la pandemia del Covid - 19 y que gran parte está dedicado a su madre fallecida y al sentimiento de tristeza que le provocó estar encerrada en su casa de Cornwall, Inglaterra y no poder visitar a sus familiares en Estados Unidos. Un disco de madurez, en la que su registro vocal no es el mismo de sus años de juventud, es más limitado y apocado (inclusive en directo, ya no llega a las notas altas) pero sigue siendo muy expresivo y conmovedor y la verdad es que supo adaptarse bien a sus circunstancias actuales. 

Es un trabajo acústico en su mayor parte y relajado, tranquilo, en el que destaco un par de canciones que me gustaron muchísimo, como "Adittion of Light Divided", "Speaking with trees", que trata de como le  habla a las cenizas de su madre, enterradas junto a un árbol, la alegre y saltarina "Spies" o la melódica "Ocean to Ocean", un reclamo por la distancia con sus seres queridos al otro lado del océano. Un disco hijo de la pandemia, momentos desesperantes donde los músicos lograron hacer catarsis en medio del caos.

Me costó conectar con él al principio, porque estoy acostumbrada a oír más los trabajos de la era dorada de la pianista, pero creo que este álbum demuestra que ella aun tiene mucho para mostrar como artista y compositora, aunque no esté en la cúspide de su carrera a nivel creativo y artístico, como en los noventa. Aun así, con sus 59 años, sigue dando batalla, grabando música y saliendo de gira, lo cual es digno de respeto y admiración. Una pena que se haya desfigurado su bello rostro con un exceso alarmante de bótox, porque poco queda de esa mujer pelirroja que mostraba que no hacia falta tener una belleza hegemónica  para triunfar en la industria musical. La portada de álbum, bellísima, lástima esa Tori que se empeña en lucir como una mujer de 30 años cuando ya no los tiene, yo prefiero las canas, las arrugas antes que esto, pero  bueno...