Xandria - Sacrificium

 

El debut de Dianne Van Giersbergen en Xandria 





Año: 2014
Metal sinfónico, Power metal
Sello: Napalm Records



Tracklist 

1. Sacrificium - 10:21   
2. Nightfall - 04:02   
3. Dreamkeeper - 04:36   
4. Stardust- 04:00
5. The Undiscovered Land - 07:34  
6. Betrayer - 06:15   
7. Until the End - 05:47  
8. Come with Me - 03:46
9. Little Red Relish - 04:39   
10. Our Neverworld - 03:51
11. Temple of Hate - 05:59  
12. Sweet Atonement - 04:20




Después de la partida de Manuela Kraller de Xandria, tras grabar aquel maravilloso "Neverworld's End" que les permitió dar el salto que necesitaban para ser una de las bandas más prometedoras del metal sinfónico europeo, Marco Heubaum y compañía contrataron a una digna sucesora: la holandesa Dianne Van Giersbergen, una soprano de formación clásica extraordinaria. Sin embargo, la banda no logró conservar a su vocalista durante mucho tiempo: solamente grabaron con ella el laureado "Sacrificium" (2014) y el irregular "Theatre of Dimensions" (2017). Xandria fue una banda que podría haber sido tan grande como Nightwish o Epica si supieran cómo conservar a sus cantantes. Dianne se marchó del grupo en el 2017, tras padecer estrés diagnosticado, porque Heubaum la quería obligar a hacer playback en los conciertos para ganar más dinero. Ella estaba lastimando su voz y no recibió ningún apoyo ni comprensión de parte de sus compañeros. 

En su momento, la salida de Van Giersbergen fue un escándalo, tanto, que Manuela Kraller y Lisa Middelhauve también opinaron en sus redes sociales. Así fue como nos enteramos que el deplorable accionar de Heubaum contra Dianne, también lo padeció Manuela (solo que lo hizo público años más tarde) y por eso dejó la banda tras la grabación de su único álbum con ellos. Lisa considera que éstos señores nunca aprenden de sus errores, que no pueden forzar a sus vocalistas hasta dañar su salud. Aeva Maurelle fue la sustituta de Van Giersbergen en los conciertos en directo, hasta el 2019. Luego contrataron a la griega Ambre Vourvahis, que es muy bonita pero carece del talento de sus antecesoras. Xandria no es más una banda de power sinfónico, sino un refrito de Delain, Sirenia y Within Temptation, no me gustó nada el último álbum de los alemanes. Lo siento, pero no puedo con la sombra de Xandria, no considerando lo gloriosos que fueron los años de Manuela y Dianne. 

Por eso hoy les traigo la reseña de "Sacrificium", un disco del cual escribí hace varios años, inclusive publiqué la reseña en otra web, pero decidí escribirla de nuevo porque mis percepciones sobre el mismo cambiaron. Me parece un gran álbum, pero un poco inferior a "Neverworld´s End"
La primera canción, la homónima "Sacrificium", dura diez minutos: pesada, guitarrera, con una orquestación bellísima y una influencia directa de los Nightwish con Tarja, algo que Xandria nunca ocultaron. Lo mejor es cuando Dianne comienza a cantar: es una soprano lírica virtuosa, dramática y teatral, en un estilo muy distinto al de Manuela Kraller. ¿Valen la pena los diez minutos? Sí, sobre todo el cambio de ritmo al minuto cinco, el solo de guitarra y la parte instrumental. La canción está bien, pero no es tan brillante como una "Ghost Love Score", no hay nada como Tuomas Holopainen cuando estaba inspirado o con mal de amores. Yo la habría dejado para el final del tracklist, porque se luciría más.

Éste disco es muy bueno, pero la calidad de las canciones es despareja. Una de las mejores es el single "Nightfall", correcto y de manual: coros, orquesta, estribillo ganchero y una performance brillante de parte de la holandesa, cumple con creces. También destacaría las más pesadas y power metaleras "Stardust", "Betrayer" (la letra se la dedicaron a Manuela Kraller, qué divinura) que desprende fiereza, épica y elegancia a la vez, "Until the End", muy sinfónica y lírica y "Little Red Relish", en las que destacan la parte instrumental y la deslumbrante voz mixta de Dianne. 

"Sacrificium"
es un gran disco, pero contiene algunas canciones que son correctas pero poco más, como los medios tiempos "Dreamkeeper"  y "Come With Me", que no son de lo más relevante. Como era de esperarse, podemos encontrar una parte melódica: la bellísima "The Undiscovered Land" que es realmente conmovedora, la balada "Our Neverworld", que es desgarradora y delicada (aunque Dianne se desata más en Ex Libris que en Xandria, créanme) ,"Temple of Hate", la típica canción folk repleta de gaitas y flautas, una hermosura y por último, "Sweet Atonement" , en la cual los violines y el piano adquieren protagonismo. Es triste pero preciosa. La que se luce de verdad es Dianne, una auténtica valkiria, dueña de un talento increíble y una técnica impecable. Ésta mujer se merecía tener una carrera brillante en la música y por culpa de un líder ambicioso y despótico como Marco Heubaum, tuvo que alejarse de la industria durante años. 

Por estos motivos, a mí me causa mucha gracia cuando algunos ignorantes repletos de prejuicios afirman que "el metal sinfónico está lleno de bandas de chicas", porque los que mandan de verdad, son los hombres, que son los que componen la mayoría de las canciones. Las mujeres son la cara visible, pero las expulsiones de Tarja Turunen y Anette Olzon de Nightwish, Liv Kristine de Leaves' Eyes y Aylin Giménez de Sirenia nos demuestran que en cuanto la cantante envejece (Liv), se casa (Tarja), se enferma (Aylin), se embaraza (Anette), recibe la carta de despedida del líder de la banda, que es varón. Sí, en las bandas de metal sinfónico cantan mujeres, pero los que dirigen la batuta, son los hombres. Así que eso de que "el metal sinfónico es música de mujeres" es una mentira grande como una casa. Hay excepciones a la regla: Within Temptation, Diabulus in Musica y Epica, pero Sharon den Adel es la esposa del guitarrista, Zuberoa, la cónyuge del teclista y Simone Simons, la ex novia del líder, Mark Jansen. Cuando no hay un vínculo familiar o conyugal entre los miembros de una banda, tarde o temprano, aparecen los problemas. Y la respuesta siempre es la misma: las señoras se convierten en divas y hay que reemplazarlas, es decir, expulsarlas. En el caso de la desafortunada Liv Kristine, recibió la carta de despedida y la solicitud de divorcio a la vez. En mi opinión, si hay un canalla más grande que don Holopainen respecto al trato hacia las vocalistas, ese es Alexander Krull. 


Volviendo a "Sacrificium", es un gran disco, pero no le doy la máxima puntuación porque no llega al nivel de "Neverworld's End": contiene canciones brillantes, buenísimas, cinco o seis, pero también hay algunas que son correctas y de relleno. Dianne Van Giersbergen superó la prueba de reemplazar a la virtuosa Manuela Kraller, entregándonos una de las  interpretaciones más importantes de toda su carrera. La holandesa es una de las mejores cinco o seis voces que yo escuché en el metal sinfónico. Mi amigo Marcapasos tuvo la suerte de verla en directo con Xandria, en España, y me dijo que era "una bestia" en el escenario. Le creo. Si hay alguien que sabe de éste tipo de música, es él. 

Lo que me gusta de ésta vocalista es que posee un estilo propio, diferente del de su antecesora. Ella tiene una personalidad muy marcada. Otra que me recuerda a su estilo de canto es la francesa Clémentine Delauney, sobre todo cuando utiliza la voz mixta. Yo soy una enamorada de las grandes voces femeninas, de las líricas y la señora Dianne es una de mis favoritas. Ojalá le vaya muy bien con su nuevo disco solista, "Soulward Bound". Si quieren escuchar más de su talento, les recomiendo el disco "Ann" de Ex Libris, en el que despliega todo su potencial de una manera más suelta, más libre. Aun así, me parece importante resaltar que "Sacrificium", hasta el día de hoy, es el último gran álbum de Xandria. Nunca más pudieron grabar uno igual y es una lástima. Por eso lo traje hoy, para recordar los buenos tiempos de ésta banda alemana, que pudo ser muy grande pero por culpa del enorme ego de su guitarrista, Marco Heubaum, se quedó a mitad de camino. 


Puntuación: 8,5/10. 















Músicos: 

Marco Heubaum - Guitarras, Teclados, composición, letras (tracks 1-8, 10, 11)
Gerit Lamm - Batería
Philip Restemeier - Guitarras
Steven Wussow- Bajo
Dianne van Giersbergen - Voz, letras (tracks 9, 12)

Invitados: 

PA'dam - Coros 
Joost van den Broek - Teclados y programación



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