Sirenia - Riddles, Ruins & Revelations

Morten Veland quiso ir a la pista de baile y se pegó un terrible patinazo...

 "Riddles, Ruins & Revelations": un experimento electrónico fallido por donde se lo mire.




Tracklist

1. “Addiction No. 1” - 04:03

2. “Towards an Early Grave” - 05:27

3. “Into Infinity” - 04:41

4. “Passing Seasons” - 04:43

5. “We Come to Ruins” - 05:12

6. “Downwards Spiral” - 05:55

7. “Beneath the Midnight Sun” - 04:43

8. “The Timeless Waning” - 04:04

9. “December Snow” - 05:20

10. “This Curse of Mine” - 04:18

11. “Voyage Voyage” (Desireless cover) - 04:18


Año: 2021

Metal Sinfónico

Sello: Napalm Records



Tenía esperanzas con el este disco de Sirenia porque me había llevado una excelente impresión de “Arcane Astral Aeons”, su segundo trabajo con Emmanuelle Zoldan, al que le di un puntaje de 8/10, pero como dice el habitual dicho sobre esta banda, con ellos es “una de cal y una de arena”. Y esta vez tocó la cal, porque me llevé una tremenda decepción con “Riddles, Ruins & Revelations”, donde me encontré con un híbrido espeluznante de metal gótico, electrónica y música disco de los ochenta. Para rematar, a Morten Veland se le ocurrió agregar un cover de una canción ochentera “Voyage Voyage” , más conocida en Latinoamérica como “Vuela Vuela”, por la mítica versión del grupo pop Magneto, es el tipo de tema que cada dos por tres aparece en una publicidad en la televisión. El mismo noruego dijo que este disco iba a estar influenciado por la música disco y los ochenta, yo me esperaba algo más sutil, no semejante desastre.

Hay que tener cuidado con la fusión con la electrónica, porque puede salir bien o mal: Within Temptation se llevaron un 7/10 con “Resist” y los holandeses Delain se ganaron 1/10 por excederse en “Apocalypse and Chill”, por haber lanzado una placa tan espantosa que el mismo fundador decidió expulsar al resto de los músicos, para “volver a los orígenes”. Le terminaré dando la razón a la ex vocalista Aylin Giménez, quien afirmó que Veland pensaba que cambiar las cantantes era una solución para elevar la calidad musical de la banda y que en esto se equivocaba.

Volviendo a Sirenia, “Riddles, Ruins & Revelations” comienza con “Addiction No. 1”, donde aparece un sintetizador, efectos electrónicos, y una melodía muy accesible y comercial. Esto no es metal sinfónico; un poco de gótico con guitarras presentes, los coros calcados del “Resist” de los holandeses, me parece que Morten anduvo paseando por Holanda… esta canción es un experimento que no termina de gustarme y convencerme, a pesar de ser correcto, entretenido y aceptable.

Pasamos a “Towards an Early Grave”, en la que nos seguimos trasladando a la pista de baile de la discoteca, a pesar de la buena labor de la base rítmica, las guitarras y esos guturales que no encajan para nada en este estilo. Aunque Emma Zoldan se desempeña bien a las voces, como era de esperar, porque currículo y profesionalismo le sobran, a las canciones les falta fluidez, potencia, garra, contundencia… Lo mismo sucede en “Into Infinity”, en la que me hizo cuestionarme si estaba escuchando a Sirenia o a Daft Punk… Ay Morten, veníamos bien…. No hacía falta grabar un disco comercial, vacío e insípido.

Las únicas tres canciones que me convencieron de este álbum son “Passing Seasons”, medio tiempo de aire gótico, donde aparece el Sirenian Choir por primera vez, y sin ser una maravilla, es el primer track que no me hace sentirme estafada; “We Come to Ruins”, la más pesada del LP y la bonita semi balada “December Snow”, que incluye fragmentos en francés. No es del todo desagradable, a pesar de los espantosos efectos electropop.

Del resto que decir… canciones como “Downwards Spiral” y “Beneath the Midnight Sun” me hacen imaginarme en la pista de electrónica de la discoteca más grande de mi ciudad, no escuchando un disco de metal gótico/sinfónico. Una combinación de guturales, voces limpias de la francesa y esos teclados happy saltarines me llevan directo a la música disco …y yo pensé que Amberian Dawn eran los que habían inventado el “ABBA Metal” en su “Looking for you” … el antiguo Sirenian Choir, brilla por su ausencia.

Más relleno aparece en “The Timeless Waning”, que podría ser de Depeche Mode, a pesar de los buenos riffs de guitarra, es un reciclado de discos anteriores, con cero complejidades, gancho y que no destaca por su melodía. El mismo caso sucede en “This Curse of Mine”, a la que calificaría de pasable, pero me sabe a poco. Composiciones simples, poco originales y no explotan el potencial de la cantante…. A esta altura del álbum, ya no aguanto más.

Pero lo peor de todo este LP es el cover de “Voyage, Voyage”, que, a pesar del encanto de estar cantado en francés, es pop descarado, comercial y que no le aporta nada bueno al conjunto, parece una burla, una broma a los fans. Al terminar de escuchar este disco, reflexioné sobre algunas palabras que dijo la ex vocalista Aylin Gimenez, (la que más discos grabó con Sirenia, antes de ser expulsada sin motivos claros o justificados) en una entrevista:


“Morten quería un cambio en la música de Sirenia y su manera de hacerlo era cambiar a las cantantes, porque en su mente, la causa de que Sirenia no crece más es la cantante, él no piensa que es él mismo el que decide y hace todo en la banda, y es el que repite su música todo el tiempo, pero por supuesto, sigue siendo culpa de la vocalista”.

Aylin Giménez, ex vocalista de Sirenia 


Hace poco me enteré de que “Perils of the Deep Blue” elevó la calidad de los álbumes de la banda, porque fue la misma española la que le dijo a Veland que los fans se quejaban en Internet, que Sirenia no era ni muy pesado, metalero, y tampoco muy pop o liviano, que debían grabar un disco de metal gótico que diera la talla. Ella se ocupó de elaborar sus líneas vocales y ahora comprendo que, si ese disco funcionó, es porque el noruego la escuchó. Pero con este “Riddles, Ruins…” no hace una autocrítica, la verdad es que la irregularidad en la discografía de este grupo se produce por un líder autócrata que no les permite participar a los demás y tampoco reconoce sus fallas como compositor. Una cosa es experimentar, innovar y uno muy diferente es sacar un álbum de metal electrónico, donde pierden toda su esencia y sonido original.

La voz de Emma Zoldan no está bien aprovechada y es una lástima que, con una cantante de semejante calibre, adoptaran un estilo artificial y comercial. Una pena porque venían de un nivel alto con el “Arcane Astral Aeons”, el problema no es la francesa, sino Morten Veland. Aquí nos entregó un disco con canciones poco memorables, sencillas, de relleno, que no tienen la contundencia y energía de antes. No ayuda la ausencia del Sirenian Choir, que le daba un ambiente más gótico, y no sirve poner un par de guturales para sonar “más heavies”.

¿Qué puedo decir de “Riddles, Ruins & Revelations”? Que es un disco decepcionante, horrible, un híbrido que no tiene ni pies ni cabeza, como álbum de metal sinfónico y gótico no funciona y tampoco como placa de electrónica… Los efectos quedan muy mal, esas baterías electrónicas, sintetizadores, rescato dos o tres canciones, pero lo demás no da la talla. No lo recomiendo en absoluto.


Puntuación: 4/10







Músicos: 

Morten Veland – Voz gutural, guitarras (Acústica y rítmica), bajo, teclados, programación, producción y masterización

Emmanuelle Zoldan – Voz femenina y traducciones al francés

Nils Courbaron – Guitarra líder

Michael Brush - Batería

Joakim Næss – Voz limpia


Comentarios

Entradas populares de este blog

Listado de Reseñas

Los 10 mejores discos del metal sinfónico

El italiano - Arturo Pérez-Reverte